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'La reforma actual pone en riesgo la garantía del derecho a la salud'

El exviceministro Germán Escobar Morales explica por qué Partido Liberal retiró apoyo al proyecto.

Germán Escobar en Casa de Nariño, en ausencia de César Gaviria, saludando al presidente Gustavo Petro. Foto: Presidencia

EDITOR POLÍTICO29.03.2023 18:50 Actualizado: 29.03.2023 18:55

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El exviceministro Germán Escobar Morales asistió en la noche del lunes a la Casa de Nariño en representación del Partido Liberal ante la negativa del expresidente César Gaviria Trujillo quien decidió marginarse al comprobar que sus aportes para mejorar el articulado no fueron tenidos en cuenta. En entrevista con EL TIEMPO, el experto explica que si se aprueba el proyecto cómo está se "genera un riesgo de insostenibilidad al mediano plazo, lo que coloca en riesgo la garantía del derecho fundamental a la salud"

Señor exviceministro, en general, ¿cuáles fueron los puntos de la reforma a la salud aportados por el Partido Liberal que no fueron tenidos en cuenta en el borrador que les presentó el ministerio de Salud?

El partido Liberal siempre fue claro en que se debe construir sobre lo construido; en ese sentido, entró a la discusión sobre la base de preservar él modelos e aseguramiento por agentes públicos, privados y mixtos. Durante las conversaciones, se intentó aproximarse a la propuesta del Gobierno de que este modelo de aseguramiento se complementara con la posibilidad de que Estado pudiera asegurar directamente también, en un esquema competitivo o de regiones apartadas donde el sector privado y el sistema ha tenido brechas en estos años. El Gobierno, en la última conversación no tomó en cuenta esta gran línea roja y ante este panorama y con el análisis de la situación, el Partido Liberal decide no acompañar este proyecto de Ley.

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Para usted de estos, ¿cuáles son absolutamente claves?

Sin duda, se parte de un diagnóstico de que este sistema de salud ha teñido enormes aciertos y logros sociales en 30 años y, al mismo tiempo, problemas importantes qué hay que corregir, nosotros los liberales reconocemos fallas que queremos arreglar, pero no arrasando con el sistema de salud. Bajo esta óptica, no se considera acertado para el país y las personas que se proponga un cambio total del sistema de salud y pasar a uno completamente gestionado por el Estado, estatizado. Ese es el punto más clave de la discusión y, a partir de éste, se deriva el resto.

Diversos sectores políticos se reúnen en la Casa de Nariño este lunes. Foto:Presidencia

¿Cómo qué?

La propuesta del diseño institucional del aseguramiento monopólico del Estado del Gobierno, presenta lo que consideramos errores al fragmentar la gestión del riesgo (financiero y de salud) en distintos puntos del sistema, sin poder contar con una verdadera “torre de control” técnica.

Desde su experiencia técnica, ¿qué significa que se pase una reforma sin estos puntos?

Más allá de un debate ideológico, preocupa sobremanera que no se construya sobre las capacidades que el modelo de aseguramiento ha generado en estas tres décadas y como se evidenció en la respuesta anterior, el diseño institucional del sistema propuesto por el Gobierno, fragmenta la gestión del riesgo y genera un riesgo de insosteniblidad al mediano plazo, lo que coloca en riesgo la garantía del derecho fundamental a la salud.

De ahí se generó la necesidad de una reunión con el presidente de la República, los partidos y el expresidente Gaviria.

¿Cómo fue el trabajo en la búsqueda de los consensos con el ministerio de Salud y los partidos?

Las discusiones técnicas fueron respetuosas dentro del disenso, sin embargo, en la medida que avanzábamos a los puntos técnicos más críticos como la gestión del riesgo en salud, a través de un modelo mixto, crecieron tensiones que fue evidente que había que dirimir en un nivel superior. De ahí se generó la necesidad de una reunión con el presidente de la República, los partidos y el expresidente Gaviria.

¿De quién cree usted que es la responsabilidad de que esto haya ocurrido?

Creo que cuando se trata de discusiones tan complejas, el uso de los términos correctos es esencial. Hablar de un en salud es muy diferente a hablar de un asegurador (así sea atípico). Por eso, más allá de responsabilidades individuales, mi evaluación de este proceso es que en la medida que la discusión avanzaba, iba quedando más claro para todos que si había diferencias de fondo y allí es que el Partido Liberal toma la decisión de apretarse, pues el Gobierno no expresó su intención de incorporar los puntos mencionados.

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El expresidente César Gaviria sostiene que es más fácil hablar con el presidente Petro y que es más difícil hacerlo con la ministra Corcho. ¿Usted qué cree?

Creo que mientras no haya el reconocimiento de ideas y argumentos distintos sobre los logros y retos del sistema de salud, las transformaciones y la forma de hacerlas en el sistema, será muy difícil tener un diálogo realmente constructivo.

¿Cómo le fue en la reunión en Palacio en representación del Partido Liberal?

Fue una reunión respetuosa, pero en la cual fue evidente las diferencias entre las posturas del Partido Liberal y del Gobierno. El presidente Gaviria me envió con un mandato claro de defender las líneas en las que cree el partido con mi capacidad técnica y un genuino interés por seguir avanzando socialmente, nos interesa la salud de los colombianos. A veces puede resultar algo intimidante ser una voz disonante en un salón, pero si hay convicción en las ideas y solidez en los argumentos (como es este el caso) se tiene el valor para defenderlos en cualquier situación.

A propósito, ¿cómo puede la opinión pública entender que tras la reunión el ministro Prada hable de un acuerdo de un 99 por ciento y al día siguiente la reforma a la salud pase literalmente al quirófano?

Como lo dije anteriormente, se trata de conceptos muy complejos y es cierto que había un acuerdo del 99% pero ese 1% de disenso, que puede significar un problema de artículos en un proyecto de Ley, es la esencia de un sistema de salud de naturalezas completamente distintas.

(No deje de leer: Reforma de la salud: a esta hora se define su futuro en reunión con Petro).

Mirando un caso particular, ¿por qué los fondos regionales no les gusta?

Nuevamente nos referimos al diseño institucional de toda la propuesta del Gobierno. Un fondo desarticulado del resto de los componentes de la gestión del riesgo en salud, es un diseño que no genera los incentivos adecuados a la calidad y la eficiencia de todo el sistema y puede incluso generar riesgos de mal manejo de los recursos públicos de la salud. Al final, un sistema ineficiente, coloca en riesgo su sostenibilidad, pues siempre habrá presiones fiscales (presupuestos limitados ante las necesidades y las nuevas tecnologías en salud) que pueden hacer quebrar al propio sistema y evitar la garantía del derecho fundamental a la salud, que es lo que aquí importa: las personas, su salud y su vida.

¿Usted, como experto, cree que lo mejor para el país es que el proyecto de la ministra Corcho se hunda y volver a presentar uno nuevo?

Yo creo que el país merece una discusión más constructiva en torno a nuestro contrato social que determinará la salud y la vida de todos nosotros y nuestros hijos por las próximas décadas. En ese sentido, si no se dan las condiciones para construir un mínimo consenso entre las ideas distintas sobre el modelo de aseguramiento en salud que debemos tener, será muy difícil que cualquier reforma aún aprobada en el Congreso pueda lograr su adecuada implementación y reglamentación en el futuro. Los tiempos son cambiantes, y por eso hay que asegurar que las reformas sociales, como ésta, tengan una base sólida desde su formulación para que sean sostenibles y sean los colombianos los que terminen protegidos y salvaguardados.