¿Por qué los glaciares serían la clave para predecir erupciones volcánicas? Esto reveló estudio

Un reciente análisis científico reveló que los glaciares situados a menos de cinco kilómetros de un volcán podrían desempeñar un papel crucial en la predicción de erupciones. 

Este hallazgo se basa en la observación de que las masas de hielo cercanas a volcanes incrementan su velocidad de desplazamiento hasta un 50 por ciento más rápido de lo habitual, lo que podría ser un indicador temprano de actividad volcánica.

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De acuerdo con un artículo publicado en la revista 'Communications Earth & Environment', la investigación incluyó el análisis de 214.086 glaciares en todo el mundo. 

Los expertos destacaron que este fenómeno podría transformarse en un sistema de alerta temprana aplicable a más de 250 volcanes globales. Ejemplos destacados son el Monte Rainier en Washington y el Monte Veniaminof en Alaska.

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El estudio subraya que el calor generado por la actividad volcánica tiene un impacto directo en la velocidad de los glaciares, especialmente en zonas con derretimiento glacial. Este vínculo abre la posibilidad de utilizar el monitoreo de los desplazamientos en el hielo como herramienta predictiva de erupciones, con un enfoque especial en regiones propensas al derretimiento.

Los glaciares, que suelen moverse lentamente debido a la gravedad, ven alterada su dinámica por factores como el derretimiento en la base, deformaciones en el hielo y la proximidad a volcanes. Este movimiento acelerado se convierte en un posible precursor de la actividad volcánica.

“Nuestra investigación tiene implicaciones importantes para la mitigación de los peligros volcánicos”, explicó Joseph Mallalieu, glaciólogo de la Universidad de Birmingham. “El deshielo glacial durante las erupciones puede provocar inundaciones repentinas y flujos de escombros capaces de sumergir rápidamente los asentamientos cercanos”. Mallalieu también señaló que en un radio de 29 kilómetros alrededor de estos volcanes con glaciares habitan aproximadamente 7 millones de personas, lo que amplifica la relevancia del hallazgo.

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Matteo Spagnolo, profesor de geociencia en la Universidad de Aberdeen, añadió: “La velocidad de los glaciares se puede utilizar como un precursor meses antes de una erupción”. Este enfoque permitirá “centrar los esfuerzos de monitoreo adicionales en los volcanes con probabilidades de entrar en erupción, lo que a su vez alertará a los tomadores de decisiones”.

Spagnolo resaltó que esta técnica innovadora podría ser clave para la planificación de evacuaciones preventivas, ofreciendo tiempo adicional a las autoridades para preparar a la población y reducir los riesgos. “También ayudará a preparar a la población local para lo que podría suceder con mucha antelación”, concluyó.

El estudio refuerza la importancia de integrar la observación glaciar en los sistemas de monitoreo volcánico, con el objetivo de proteger vidas humanas y mitigar desastres naturales.

La Nación (Argentina) / GDA