Conferencia Episcopal de Colombia publica oración por la paz en zonas afectadas por combates

Hace algunos días, la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) convocó a los fieles católicos a una Jornada Nacional de Oración por la paz de las zonas del país que en estos momentos se encuentran en conflicto.

Este evento, al que varios devotos se han unido, se enmarca dentro de la sexta edición de la ‘Palabra de Dios’, con la que el papa Francisco invitó a la iglesia a celebrar cada domingo la justicia y la claridad del Señor.

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En ese sentido, tras la delicada situación que se está viviendo en este momento en la región del Catatumbo, en el Norte de Santander, la institución católica a través de su sitio web hizo un llamado de atención a los feligreses para que buscaran al Padre como fuente de consuelo en medio de la crisis humanitaria.

Además, el Departamento de Liturgia del Secretariado Permanente del Episcopado preparó un documento con actividades litúrgicas para que cada parroquia del país se sume a la causa este 26 de enero del 2025.

Por su parte, la Conferencia Episcopal de Colombia, aclaró que por medio de esta iniciativa, la Iglesia Católica pretende unir a las personas en un gesto de petición para promover un mensaje de paz y esperanza.

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Hoy nos reunimos como comunidad de fe para pedir al Señor el don de la paz y la reconciliación en el Catatumbo y en todas las regiones afectadas por la violencia. Inspirados por las palabras de Jesús: ‘Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios’, elevemos nuestra oración confiando en que el Señor es fuente de consuelo para los afligidos, fortaleza para los que sufren y esperanza para quienes anhelan la justicia. Que esta Eucaristía sea un signo de nuestra comunión solidaria con las víctimas y un compromiso por ser instrumentos de su paz.”

Señor de la vida y de la paz,

Tú nos has dicho: “Bienaventurados los que trabajan por la paz,

porque serán llamados hijos de Dios”.

Hoy elevamos nuestro clamor por el Catatumbo,

tierra golpeada por la violencia y el dolor.

Derrama tu Espíritu sobre esta región

para que los corazones endurecidos se transformen

y cesen las armas que siembran muerte y destrucción.

Protege a los inocentes,

a los niños, mujeres, ancianos y desplazados,

y consuela a quienes lloran por la pérdida de sus seres queridos.

Inspira a los líderes y autoridades

para que trabajen con justicia y sabiduría,

buscando caminos de reconciliación y esperanza.

Haznos a nosotros, tus hijos,

constructores de paz y solidaridad,

comprometidos en sanar las heridas de nuestro pueblo.

Que en el Catatumbo florezca la fraternidad,

y que en Ti, Señor, encontremos la fuerza

para seguir luchando por un mundo nuevo.

Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

*Oración tomada de 'CEC'.

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STEPHANY GUZMÁN AYALA

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL