¿Qué es y para qué sirve una cava de vinos? conozca sus características

Estos son armarios climatizadores diseñados para guardar y conservar las botellas de vino.

Evite las filtraciones que a largo plazo pueden estropear el producto. Foto: iStock

16.03.2023 12:59 Actualizado: 16.03.2023 17:16

Comentar

El vino es un producto perecedero que puede verse afectado negativamente por muchos factores, entre ellos la exposición a la luz, la temperatura, la presencia de olores fuertes, entre otros. Por esta razón, y para garantizar la calidad y la conservación del vino, es fundamental almacenarlo en un espacio adecuado como una cava.

Las cavas de vino son muy importantes en el proceso de guarda y conservación de los mismos, ya sea en formato botella o en barrica.

Desde su creación son las encargadas de almacenar y proteger el vino de los agentes externos que puedan causar un daño en el producto. Si es un amante del vino o le gustaría coleccionar botellas, una cava de vinos puede ser esencial para almacenar su colección y preservar su calidad.

(Lea también: 10 vinos para empezar su cava).

Tipos de bodegas

Cada tipo de cava está diseñado para crear un ambiente de almacenamiento específico que ayude a mantener el vino en las mejores condiciones posibles. Según el blog Bodegas Raíz de Guzmán, existen en principio dos tipos de bodegas:

Las bodegas activas o artificiales

Mantienen condiciones óptimas de almacenamiento, dado el control exhaustivo de factores como la temperatura o la humedad a través de maquinaria y herramientas tecnológicas.

Las bodegas pasivas o naturales

Este control es más complicado, se suelen construir bajo tierra a una distancia prudencial y establecida por especialistas. Permiten reducir las oscilaciones de temperatura y humedad, entre otros factores.

(Siga leyendo: Investigación dice que el vino tinto podría combatir estrés y ansiedad).

Beneficios y especificaciones de una cava de vino

El principal beneficio de la cava del vino es proteger el producto de los agentes externos que pueden dañarlo, y asegurar su adecuada conservación para mejorar su calidad, aroma, sabor y complejidad a medida que madura.

Estas son algunas de las condiciones óptimas que debe tener una cava según las bodegas ‘Franco-Españolas’.

Para garantizar la calidad y la conservación del vino, es fundamental almacenarlo en un espacio adecuado como una cava. Foto:iStock

Temperatura

Es uno de los factores más importantes y que se deben evitar las fluctuaciones extremas.

La función principal de los muebles para guardar botellas de vino es mantener la temperatura lo suficientemente baja para evitar la degradación. También lo más estable posible, ya que son perjudiciales los cambios de clima.

Generalmente está situada entre unos 7 ºC y unos 18 ºC, en función de los vinos que se almacenen.

Humedad

Los modelos más completos suelen contar con un higrómetro que mide el porcentaje de humedad relativa del aire en el interior de la cava, y de un regulador para controlar este nivel de humedad. No debe ser ni muy húmedo, porque permitiría filtraciones en los corchos, ni muy seco, porque los agrietaría.

Además, el portal de Raiz de Guzmán comenta que, tanto en las cavas activas como en las pasivas, el nivel de humedad debe estar entre el 75 y el 80 %. Un exceso de humedad puede dañar el corcho y provocar filtraciones que a largo plazo pueden estropear el producto.

Ventilación

Un factor importante en el cuidado de los vinos es la circulación de aire para evitar malos olores y la absorción de aromas por parte del vino. Evitando siempre corrientes excesivas que pueda originar variaciones de temperatura.

(Le puede interesar: Speyer: expertos creen que es posible beber vino de 1.700 años de antigüedad).

Posición de las botellas

En cuanto a la posición de las botellas, cuenta Raiz de Guzmán que existe una tradición de colocarlas en posición horizontal para mantener el o constante del líquido con el corcho. Otros expertos sugieren la verticalidad para evitar la exposición excesiva del corcho al líquido.

Aspectos a tener en cuenta

Debe tener en cuenta el tipo de vinos que va a guardar, ya que tienen necesidades diferentes. La cantidad de botellas que quiere conservar, puede ser de 3 a 8 botellas para consumo habitual o más grandes dependiendo el gusto. También debe tenerse en cuenta el tiempo durante el que se va a conservar el vino y la disposición de los espacios.

REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL

EL TIEMPO