Al chef
pastelero Buddy Valastro el público lo ha visto lidiar con una novia que, al ver su torta de bodas blanca, tomó una manga pastelera de colores para cubrirlo de manchas y rayones. Televidentes de todo el mundo lo vieron reponerse de su disgusto y preparar para ella una torta mucho mejor que la anterior.
También lo vieron trabajar contra reloj –en conjunto con su equipo de Carlo’s Bake Shop, de New Jersey– para reponer una torta de cuatro pisos que había rodado por las escaleras cuando iba ser llevada a su destino.
Son retos que el público le ha visto superar a Bartolo ‘Buddy’ Valastro, a través de las temporadas de su programa de televisión 'Cake Boss', un 'reality' de pastelería que está al aire desde el 2009 y que convirtió a Buddy, a su familia, a sus chefs pasteleros especialistas en “arquitectura” de tortas y a sus decoradores, en celebridades culinarias.
Pero quizás el reto más grande que ha enfrentado lo vive desde septiembre del 2020.
Un instante le cambió la vida: Valastro, famoso por su habilidad en el detalle para diseñar y decorar tortas alucinantes -algunas en forma de esculturas realistas– jugaba en una bolera casera, en su residencia.
La máquina solía trabarse y la hacían funcionar moviéndole algún mecanismo. Confiado, Valastro introdujo su mano con tan mala suerte que el aparato empezó a moverse y una varilla de metal le perforó lenta y dolorosamente la mano, no una, sino tres veces. Sus hijos de 16 y 13 años lograron liberarlo después de cinco agónicos minutos.
Su siguiente 'post' en su cuenta de Instagram desató la preocupación de sus iradores: “Tuve un terrible accidente, hace pocos días. ¿Qué piensan de mi nuevo rio?”, preguntaba Valastro mostrando una férula que cubría su brazo derecho.
Aún al anunciarlo parecía optimista. La siguiente publicación, del 28 de septiembre, lo mostraba ya en casa, convaleciente, rodeado de toda la familia, aún con la férula protegiendo su brazo. No tardó mucho en subir una fotografía suya, todavía en casa, decorando una sencilla y pequeña torta, con su mano izquierda.
Pasarían semanas antes de que diera entrevistas. A 'People', le habló del dolor que no lo dejaba dormir. Reveló que el accidente sí fue tan grave como para haber estado a punto de despedirse de la profesión a la que le dedicó su vida.
Practicamente no ha hecho otra cosa desde que en su adolescencia, en 1988, hizo una torta de cumpleaños para su madre.
Valastro heredó Carlo’s Bakery, de su padre. Este la había adquirido en 1964 (su antiguo dueño la fundó en 1910). Su sueño siempre ha sido ubicarla entre las mejores del mundo. De su programa 'Cake Boss' se desprendieron otros como 'El desafío de Buddy', en el que se convertía en juez de pasteleros jóvenes, este tuvo una versión latina. En otro 'show', aceptó competir con Duff Goldman, otro diseñador de tortas monumentales, que a su vez tenía su propio 'reality'.
En su pastelería las tortas arco iris y sus 'lobster tails', una suerte de conos de hojaldre rellenos de crema, son éxitos diarios de ventas. Sobre sus recetas y vivencias en la mesa ha escrito numerosos libros.
Pero en octubre, el artista del 'fondant' y el azúcar le dijo a 'Entertaintment Tonight' que estuvo a punto de perder la mano. “No tengo ahora tanto movimiento, fuerza ni destreza”. El pastelero de 43 años iba ya por la tercera cirugía (el 21 de octubre) y anunciaba que quizás podrían requerirse más. “El temor sigue ahí, el de no poder volver a preparar pasteles”, decía.
El accidente le causó un daño en los nervios y no tenía ya -según dijo- sensibilidad en los dedos. “En realidad es cuestión de continuar haciendo rehabilitación –manifestó–. Podría ser como un boxeador que tiene el corazón, pero ya no tiene las herramientas. Y espero que este no sea el caso, pero solo el tiempo lo dirá”.
Podría ser como un boxeador que tiene el corazón, pero ya no tiene las herramientas. Y espero que este no sea el caso, pero solo el tiempo lo dirá
Pero Valastro, que a medida que se recupera no deja de agradecer que su mano siga en su lugar, piensa dar la pelea. Puede ser que ahora “maneje el tenedor como un niño pequeño”, pero tiene fe en mejorar antes de decidirse a emplear en serio la izquierda.
En contraste, mientras va recuperándose –los médicos estimaron que la hinchazón puede tardar hasta un año en desaparecer–, el público podrá verlo en de Discovery Home & Health ha empezado a ver el especial 'Buddy vs. la Navidad' que Valastro había preparado -con una antelación larga, incluso anterior a la pandemia- para este diciembre.
En el especial, de cuatro episodios, se plantea una competencia entre pasteleros y diseñadores de diferentes disciplinas, entre estos un soplador de vidrio, un diseñador escénico un experto en animatronix y un constructor de Lego. El objetivo de cada uno es “capturar mejor el espíritu de la Navidad” en creaciones elaboradas en tiempos límite de 24 horas.
Los primeros capítulos ya salieron al aire (el 8 y el 21 de diciembre), pero tienen repeticiones. Los restantes se estrenarán el 24 y el 26 de diciembre, a las 9 p.m.
En ellos, Buddy y sus equipo resuelven desafíos como la elaboración de casas de jengibre de tamaño real, globos de nieve o pasteles en forma de trineo. “Recuerdo haber pensado que estos podrían haber sido mis últimos pasteles”, confesó Valastro cuando invitaba al público ver el estreno de 'Buddy vs. La Navidad' en Estados Unidos.
LILIANA MARTÍNEZ POLO
REDACCIÓN DE CULTURA