Los cambios que propone la ‘contrarreforma’ laboral

Un grupo de 25 congresistas, la mayoría de ellos liberales, presentó en el Congreso un proyecto de reforma laboral alternativo al del gobierno de Gustavo Petro, un documento que recoge las recomendaciones realizadas por el Observatorio Laboral y Fiscal de la Pontificia Universidad Javeriana.

La idea de los congresistas, entre los que están algunos como Carlos Ardila, es que se incluyan estos cambios dentro de la propuesta original, la cual se podría llegar a aprobar en esta legislatura si se convoca a sesiones extras.

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La propuesta también fue firmada por otros congresistas como Julián Peinado, Julia Miranda, Andrés Calle, Diógenes Quintero, Gerson Montaño, Diego Patiño Amariles, Óscar Darío Pérez, Katherine Miranda y Luis Carlos Ochoa, entre otros.

Estos son los grandes cambios frente al proyecto inicial liderado por la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez.

Según el proyecto del Gobierno, la jornada de trabajo nocturna empezaría a las 6 de la tarde y no a las 9 de la noche, como sucede actualmente, es decir, serían tres horas antes.

Además, se busca aumentar el recargo dominical y festivo del 75 al 100 por ciento sobre el salario ordinario en proporción a las horas laboradas.

Sin embargo, la contrarreforma propone que la jornada se quede tal y como está hoy, es decir que vaya hasta las 9 de la noche y que a partir del 1.º de enero del 2024 se reduzca hasta las 8 de la noche.

Adicional a ello, proponen que cuando la tasa de informalidad laboral se encuentre por debajo del 45 % y el desempleo por debajo del 9 %, la jornada nocturna del año siguiente empiece a partir de las 6:01 p. m.

Esto se justifica porque los incrementos de costos laborales por conceptos de recargo nocturno podrían afectar a las empresas, más aún teniendo en cuenta que todo el sector económico todavía está en etapa de recuperación después del covid-19 y actualmente está golpeado por la alta inflación y altas tasas de interés.

“En la medida en que mejore el panorama económico y haya más formalidad y menos desempleo, se podrá disminuir la jornada diurna, hasta las 6 de la tarde”, sostiene la propuesta de los congresistas.

Respecto a los recargos dominicales, proponen que suba del 75 por ciento actual al 85 por ciento.

Lo que comparten ambos proyectos es que la jornada laboral no supere las 8 horas diarias ni las 42 horas semanales, distribuidas en 5 o 6 días a la semana, garantizando siempre un día de descanso.

El proyecto del Gobierno busca que todas las personas contratadas o subcontratadas en las empresas tengan los mismos derechos salariales y prestacionales. No obstante, la nueva propuesta dice que si las empresas contratistas y contratantes tienen la misma estructura de pagos legales y extralegales se podrían tener consecuencias negativas para las micro y pequeñas empresas.

El proyecto del Gobierno también habla de que se disminuya la figura de las empresas de servicios temporales (est), puesto que no se podrían celebrar estos contratos para el caso de actividades permanentes.

En la propuesta firmada por los 25 congresistas se busca definir la figura de las empresas de servicios temporales. Se dice que estas son las únicas autorizadas para suministrar personal en misión y que se utilizarán cuando se trate de labores ocasionales, cuando se requiera reemplazar personal durante períodos de ausentismo temporal por licencias, permisos, vacaciones y/o incapacidades o para atender incrementos en la producción, el transporte, las ventas de productos o los períodos de cosechas.

“Nuestro proyecto define los encadenamientos productivos y fortalece los procesos de inspección para sancionar el incumplimiento de obligaciones laborales”, dicen.

Uno de los cambios que trae el proyecto de reforma laboral que radicó el Gobierno es que busca formalizar a todas aquellas personas que hoy en día trabajan en las plataformas digitales tecnológicas, tales como Rappi y Uber, entre otras.

La propuesta de la ministra Ramírez es que los trabajadores de plataformas digitales de reparto o entrega deberán estar vinculados mediante contrato de trabajo y las cotizaciones a seguridad social deberán hacerse como trabajadores dependientes, que podrá ser en la modalidad de tiempo parcial. Eso sí, se especifica que en esta modalidad de trabajo no podrá pactarse la cláusula de exclusividad.

El proyecto de reforma laboral alternativo tiene todo un capítulo para definir lo que es el trabajo independiente, colectivo y subordinado.

“Se entiende por intermediación digital del trabajo o de servicios aquella actividad por la cual una plataforma digital o página web hace uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones para poner en o oferentes de servicios o de trabajos con demandantes de servicios o de trabajos, así como con s finales, con la presencia de una comisión o remuneración por el ejercicio de la intermediación”, dice la nueva propuesta.

También dice que las plataformas que realicen intermediación digital del trabajo deberán afiliar a la seguridad social en pensión y riesgos laborales y asumir el pago de la seguridad social en proporción los ingresos mensuales devengados por todos aquellos trabajadores y trabajadoras que a través de la plataforma o en utilización de la misma reciban un ingreso inferior a un salario mínimo.

“Cuando en el mes respectivo los trabajadores generen ingresos superiores al salario, las cotizaciones a seguridad social en salud, pensión y riesgos laborales correrán por cuenta del trabajador o trabajadora en proporción al 40 % del ingreso mensual devengado y la plataforma que intermedia el trabajo se encargará de retener y descontar el monto correspondiente de los pagos a efectuarse a través de la plataforma”, dice la nueva propuesta.

La nueva propuesta habla de que las cotizaciones a pensión y riesgos laborales de las personas que devenguen ingresos mensuales inferiores a un salario mínimo se realizarán en proporción del ingreso mensual percibido en el mes correspondiente.

“Esto beneficia sustancialmente a personas con trabajos informales, que tengan ingresos menores de un salario mínimo”, dicen los congresistas.

Así, en lugar de cotizar por semanas como está hoy, se cotizaría en proporción al ingreso recibido y cada que vez que una persona complete un cuarto de salario mínimo (que es cerca de 290.000) de ingreso se suma una semana de cotización.

Los congresistas proponen que los viáticos permanentes constituyan salario en aquella parte pagada en dinero y destinada a proporcionar al trabajador manutención y alojamiento, pero no en lo que solo tenga por finalidad proporcionar los medios de transporte o los gastos de representación.

“Siempre que se paguen en dinero debe especificarse el valor de cada uno de estos conceptos para determinar la connotación salarial de los viáticos en manutención y alojamiento”, dice la propuesta.