Tesla bajó el precio de su sedán Model 3 por segunda vez este año. La decisión se conoció este miércoles 6 de febrero después de que el fabricante de vehículos eléctricos perdiera un crédito fiscal con el que pretendía volver sus autos más accesibles a los compradores estadounidenses.
En un intento por generar ganancias, la compañía está aumentando la producción del Model 3 y también ha estado recortando costos.
El crédito fiscal que le daba Estados Unidos a Tesla comenzó a retirarse gradualmente en enero, elevando el precio de sus automóviles en 3.750 dólares. La empresa de autos eléctricos dijo que había reducido el valor de su Model 3 en 1.100 dólares, luego de recortar su precio 2.000 dólares menos a comienzos del año.
El cambio deja el precio básico del sedán en 42.900 dólares, aún muy por encima del precio de 35.000 dólares que Elon Musk, presidente ejecutivo de Tesla, había prometido originalmente. El directivo le dijo a un de Twitter que la compañía está "haciendo todo lo posible" para reducir el precio base del Model 3 a 35.000 dólares sin créditos. "Es un trabajo súper duro", escribió.
El multimillonario ha estado en los últimos meses impulsando iniciativas de reducción de costos al reducir su personal y terminar un programa para clientes, que según un comunicado de la compañía, le permitió reducir el precio del auto.
Tesla también estaría interesado en ingresar al mercado de los sedanes en Europa con su Model 3 para competir directamente con el BMW serie 3 y el Wolkswagen Golf. Aunque, todavía falta la aprobación de las autoridades respectivas para comenzar a vender en la región, se espera que esto no impida que el fabricante de automóviles comience las entregas el próximo mes.
"Estamos entusiasmados de traer el Modelo 3 a Europa y China a principios del próximo año, dado que el mercado de los sedanes de tamaño mediano en esas regiones es incluso más grande que en América del Norte", dijo Musk durante el anuncio de las ganancias de octubre.
Tesla obtuvo previamente la aprobación para requisitos de seguridad, ruido, medioambiente y producción a través del regulador holandés conocido como RDW.
REDACCIÓN TECNÓSFERA
*Con Reuters y Bloomberg