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Dulces: un gusto que puede enfermar a sus mascotas
Su metabolismo, distinto al de las personas, puede descompensarse con la ingesta de dulces.
Dulces y chocolates son nocivos para las mascotas Foto: iStock
Por más irresistible que resulte la mirada con la que su perro le pide compartir con él lo que esté comiendo, evite hacerlo si se trata de dulces. Los tutores tienden a pensar que no es peligroso, sobre todo si se trata de un dulce pequeño.
Pues conviene que sean conscientes de que esto puede terminar en una visita de emergencia al médico veterinario.
Si bien chocolates, galletas, tortas, helados, gomas, gelatinas, frunas e incluso frutas suelen ser llamativas para las personas, y también para los caninos domésticos, cuando estos se ingieren repetidamente, y no necesariamente en exceso, pueden generar problemas tanto en los perros como en los seres humanos. Así que antes de compartir cualquier dulce con su compañero peludo, es importante que tenga ciertas cosas en cuenta.
Su metabolismo es diferente al de las personas
El sistema digestivo de un perro difiere mucho del de los seres humanos. Estas diferencias van más allá de la anatomía e incluyen la parte fisiológica: los antepasados cánidos del perro doméstico que conocemos eran netamente silvestres y sus dietas estaban compuestas de otro tipo de alimentos.
Las principales diferencias radican en que el páncreas (el órgano encargado del metabolismo de las grasas y la glucosa) es muy susceptible a los altos niveles de glucosa y grasa, lo que lleva a la producción excesiva de enzimas digestivas para contrarrestar en algo el consumo elevado.
Todo esto desencadena una sobrecarga no solo del páncreas, sino también orgánica. Además, el intestino de los perros es más corto que el de las personas, lo que hace que muchos alimentos y sus nutrientes no se puedan metabolizar rápidamente, llevando a una acumulación nociva dentro del organismo.
Evite: ni un pedacito
Dulces y chocolates son nocivos para las mascotas Foto:iStock
Puede que no pase nada si el perro come un trozo pequeño de dulce. El problema aparece cuando el consumo de azúcar es constante o excede la cantidad máxima que el organismo del animal es capaz de metabolizar. El nivel normal de glucosa en sangre de los cachorros es de 90-150 mg/dL y de los adultos es 70-125 mg/dL.
Cuando se sobrepasan esos niveles, o el consumo es frecuente, llegan los problemas.
Estos son los más frecuentes:
– Diabetes: aunque las causas de la diabetes son diversas, cuando hay un exceso de azúcar en sangre el páncreas no produce la suficiente insulina para poder metabolizarla.
– Problemas en la cavidad oral: caries, encías inflamadas, pérdida de dientes, mal aliento, enfermedad periodontal y acumulación de bacterias en la boca, se cuentan entre ellos.
– Sobrepeso y obesidad: el organismo aprovecha las cantidades de calorías que necesita para todas las funciones vitales. El exceso se acumulará en forma de grasa llevando a las mascotas a aumentar de peso.
– Pancreatitis: al verse obligado a producir más enzimas digestivas para poder llevar a cabo el metabolismo, el páncreas se sobrecargará y, en consecuencia, se desarrollará un proceso inflamatorio del órgano.
– Sistema digestivo y sistema nervioso: no solo el páncreas se ve afectado. Todos los sistemas se pueden ver impactados negativamente: habrá problemas como gastritis, úlceras, problemas intestinales, hiperactividad y ansiedad.
– Sistema cardiovascular: al haber un exceso de glucosa en sangre, se producirá una excitación anormal del sistema circulatorio dando como resultado una afectación cardiaca.
La mayoría de los concentrados que se encuentran en el mercado están hechos de almidones que provienen de productos como el arroz, el sorgo, el maíz, el trigo, la cebada y la soya.
El problema aparece cuando el consumo de azúcar es constante o excede la cantidad máxima que el organismo del animal es capaz de metabolizar
Al ser descompuestos en el organismo, dichos almidones son metabolizados en forma de glucosa. Por este motivo, las dietas inadecuadas (ricas en carbohidratos o grasas) también pueden ser causantes de problemas y desbalances en las calorías en los perros, por lo que también conviene prestarles mucha atención a las tablas nutricionales de los alimentos para mascotas.
Tenga en cuenta, también, que algunos alimentos con los que algunos propietarios tienden a suplementar a sus mascotas, como frutas, miel y a, al final del proceso metabólico terminan siendo transformados en glucosa y pueden generar los mismos problemas que un chocolate, un dulce, un helado o un brownie. Conviene evitarlos al máximo.