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Noticia
Paula López Espinosa: 'Nuestra sociedad es una legión de almas heridas'
La escritora colombiana de literatura espiritual acaba de presentar en España su nuevo libro, La Joya de tu Alma, un viaje de resiliencia y transformación. Entrevista.
La presentación del libro de Paula López Espinosa se llevó a cabo el pasado 10 de abril en el Club Financiero Génova, de Madrid. La acompañó el ex ministro de Trabajo Manuel Pimentel, fundador de la editorial Almuzara. Foto: Editorial Almuzara
En 1993 la revista Semana calificó el matrimonio de Paula López Espinosa como la boda del año. La ceremonia se celebró en la Catedral Primada de Bogotá, la oficiaron tres obispos, y a la fiesta, en el Jockey Club, asistieron 1.200 invitados, entre ellos el presidente y varios expresidentes. Fue un derroche de lujo y ostentación que dejó huella en el Jet Set colombiano.
“Yo tenía 24 años y era una persona cansada de tener que vivir una vida con máscara. Una máscara que ni siquiera me ponía yo, sino la gente de afuera, que pensaba que una mujer que lo tenía todo material y socialmente debía ser feliz por obligación. Absurdo. Era todo absurdo”, recuerda ahora Paula desde Madrid, en España, la ciudad en la que fijó su residencia en 2022 para empezar de cero, huyendo de una existencia rota.
Paula López espinosa nació en Bogotá en 1968, en el seno de una familia acomodada, hija de una política y un empresario y mecenas de arte. Desde niña sintió el llamado de la espiritualidad y le apostó al voluntariado y al servicio social, tratando de estar todo lo lejos que podía de un mundo de glamour por el que desfilaban grandes figuras de los negocios y de la política.
Paula López Espinosa es coach de vida, columnista y escritora de literatura espiritual. Foto:Editorial Almuzara
Atraída por el arte decidió estudiar diseño de joyas en Roma y una maestría en gemología y diamantes en Bélgica. Durante un tiempo se dedicó a la joyería y a la comercialización de diamantes, pero abandonó una carrera aparentemente exitosa, un hogar aparentemente feliz y una familia aparentemente privilegiada para transitar sus heridas en una noche oscura del alma de la que ha salido increíblemente transformada.
“Paula López Espinosa convierte su escritura en una herramienta de salvación. Su libro es una guía para la superación personal, y muestra que, por muy grande que sea la adversidad, la capacidad del ser humano para enfrentarla y convertirla en ganancia es aún mayor”.
Hoy, Paula es coach de vida con más de 20 años de formación, a lo largo de los cuales ha acompañado a miles de personas que buscan sanación. También es columnista y escritora de literatura espiritual. Es autora de Tu alma. Una joya para pulir, Mis píldoras para el alma y Mis respuestas para el alma. El pasado 10 de abril presentó en Madrid su cuarto trabajo: La Joya de tu Alma. El método único en el mundo para brillar desde tu interior, de la editorial Almuzara, lo que ha supuesto, dice ella, su propia “conquista de Europa”, pues es bien sabido que el mundo editorial español difícilmente publica autores desconocidos en ese país.
El doctor Mario Alonso Puig, fellow en cirugía por Harvard University Medical School, uno de los gurús del desarrollo del potencial humano, con millones de seguidores en el mundo, escribió el prólogo de La Joya de tu Alma. “Paula López Espinosa invita al lector a abrirse a la posibilidad de que, donde parece que tan solo hay un muro, aparezca un camino”, dice Puig.
El escritor español Javier Moro, ganador del premio Planeta, ha dicho del libro: “Paula López Espinosa convierte su escritura en una herramienta de salvación. Su libro es una guía para la superación personal, y muestra que, por muy grande que sea la adversidad, la capacidad del ser humano para enfrentarla y convertirla en ganancia es aún mayor”.
La Joya de tu Alma guía al lector por el camino de la transformación. También le sirve de pretexto a Paula para contar su propia historia de dolor y coraje, de perdón y esperanza. Una historia donde hay pérdida de afectos familiares, violencia, enfermedad, maltrato, traición y mucha soledad.
¿De dónde surge este libro?
Yo estaba en una guerra en la que me sentía herida por todas partes. Traicionada, abandonada, maltratada. Tuve que salir de Colombia para sanar. Y en ese proceso se iba produciendo el libro, porque era lo único con lo que me podía desahogar. Entonces, en la medida en la que iba escribiendo trasegaba el camino del miedo, de la soledad, de la traición, del dolor. Lo único que hacía para sanar era escribir y escribir. Lo hago desde niña porque tuve una infancia solitaria y melancólica.
Usted era una joyera con una carrera reconocida. ¿Cómo era vivir bajo ese brillo y por qué se sentía tan vacía?
Siempre sentí el llamado de la espiritualidad en mi alma. Y me gustaba el diseño de joyas porque consideraba que el arte tiene mucho de espiritualidad, pero sentía que trabajaba en un mundo en donde de alguna manera las personas usaban el lujo para tapar sus heridas. El lujo era una careta más que se ponían, pero en el fondo estaban rotas. Entonces la gente llegaba a mi joyería a buscar una joya y yo terminaba haciéndole dos horas de coaching, y no me importaba si me compraban, yo simplemente los escuchaba. Esa joyería estaba en Bogotá, pero simultáneamente llegué a tener una en Miami y otra en Madrid. Y ahí fue cuando me volví loca.
¿Por qué?
Porque me di cuenta de que mi vida era un corre corre para tratar de cumplirle al mundo las obligaciones autoimpuestas, que es como vive la mayoría. Es una queja permanente: yo hablo con muchas personas en consulta que me dicen ‘estoy agotada, me duele la vida, el trabajo me sobrepasa, no puedo más’. Y la gente se quema para demostrarles a otros que ganan más dinero o que tienen un mejor cargo, pero cuanta más necesidad tienen de trabajar más se queman y más van cayendo en el vacío.
Esa necesidad desmedida de trabajar ¿no es una forma de llenar el vacío?
Totalmente. Es una forma de esconderlo, de disimularlo.
El español Manuel Pimentel, ex ministro de Trabajo, dijo durante la presentación de su libro en Madrid que a la editorial Almuzara (de la que es fundador) le había costado clasificar La Joya de tu alma. ¿Por qué?
Paula López Espinosa es coach de vida. Foto:Editorial Almuzara
Esa fue una de las cosas que se me quedaron grabadas. Pimentel dijo que no es un libro de desarrollo personal, ni de crecimiento humano, ni de autoayuda ni de espiritualidad, sino todo lo anterior y más. De hecho, lo trasciende. Es alquimia y sabiduría, esas fueron sus palabras. Yo siento que aquí no hay una denuncia, hay un testimonio de inspiración paraayudar a las personas a traspasar el dolor y a renacer de las cenizas cuando la vida se les ha derrumbado, como me pasó a mí. No se trata de manipular al lector ni de venderle historias, es un libro que desnuda el alma de la persona que lo escribe.
Es la primera vez que se muestra de una manera tan abierta y honesta frente a lo que fue su vida familiar. ¿Por qué lo hace?
Porque yo había escrito otros libros donde sentía que había mostrado mi corazón a medias. Yo descendí al infierno del dolor porque se me destruyeron todas las áreas de mi vida: mi familia, mi matrimonio, mi salud, el fallecimiento de mi padre. Tuve que apropiarme de una gran valentía para transmitirle al lector que la felicidad no está afuera, no está en la posición económica o social, y que cuando pierdes absolutamente todo, tu estabilidad se derrumba, caes al pozo del dolor, pero debes restaurar tu vida. Lo que importa, al final, no es lo que te pasa, sino lo que haces con lo que te pasa.
Usted habla de la relación con su madre, con su padre, con sus hermanos y con su pareja. ¿Qué fue lo más duro de aquellas vivencias?
La soledad. El abandono.
Ha dicho que este libro no es una denuncia y que no pretende hurgar en la herida, ni lastimar. ¿Siente que perdonó todo lo que aconteció en su familia? ¿La soledad, el abandono y la traición?
Lo primero que tuve que hacer en mi proceso fue perdonarme a mí misma, porque la primera herida, el primer resentimiento que tenía era conmigo misma por haber permitido que se me hiciera daño, que se me violentara tanto. Y lo permití por el miedo al abandono y a la soledad, lo cual significa que seguía sangrando la herida. Cuando sano y me hago responsable de mi vida, ya puedo perdonar a los demás entendiendo que ellos también han sido heridos y que hieren desde esa herida. Entonces, si uno no se sana el mundo se convierte en legiones de seres heridos que van hiriendo a los demás. Y eso es lo que estamos viendo en nuestra sociedad: legiones de almas heridas que no asumen la responsabilidad de sanarse.
Y eso es lo que hace que el mundo resulte tan poco esperanzador. ¿Tiene esa sensación?
Claro. Si me hago responsable de mi vida y me sano, no lastimo nadie. Un estafador emocional, por ejemplo, ¿por qué estafa? Porque vive desde su herida del narcisismo, del no sentirse reconocido, valioso. Si sana, rompe con la infidelidad, con la traición.
¿Cómo define la estafa emocional?
Un estafador emocional es quien utiliza el engaño con el ánimo de producir un perjuicio a otro. Es aquel que utiliza la mentira para defraudar a la persona con quien estableció un compromiso afectivo, basado en la lealtad, la honestidad, la buena fe y la confianza. Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos sido víctimas de algún estafador emocional: es una experiencia devastadora y traumática. El problema es que muchas personas que tienen baja autoestima y que son manipuladas por el estafador emocional creen que quedarse en esa relación significa ser leales al vínculo.
Casi que eso fue lo que nos enseñaron siempre. Que esa ‘estafa emocional’, como usted la define, era parte del vínculo de pareja y que había que asumirlo como si no pasara nada.
Ese es un pre condicionamiento mental que se nos ha impuesto sobre todo a las mujeres desde nuestra infancia. Nosotras veíamos a las abuelas, a las madres víctimas de infidelidad y adulterio quedarse calladas. En mis charlas hablo mucho del empoderamiento, pero no como una exhibición de feminismo agresivo, sino como la renuncia a permanecer presa de la herida. Y en el libro cuento mi caso, la traición que sufrí en el matrimonio, que fue la estocada final en esa colección interminable de pérdidas y dolores.
En Colombia son comunes las familias paralelas, hombres que conviven con dos o más mujeres al mismo tiempo. Es como si fuéramos polígamos. ¿Qué dice eso de este país?
Que estamos viviendo en el machismo absoluto, un machismo que nace del relativismo moral, que no diferencia entre el bien y el mal, entre lo correcto y lo incorrecto. La moral se relativiza. Muchas personas caen en la tentación de la infidelidad, del adulterio y de la falta de valores porque no son capaces de vivir desde el espíritu, sino desde el ego.
Usted habla de una ‘sed de espiritualidad’ en el mundo actual. ¿A qué se debe?
A que la gente está cansada de vivir con una máscara puesta...
¿Estamos pretendiendo ser lo que no somos?
Sí. Y eso revienta a las parejas, a las relaciones de padres e hijos, entre hermanos, entre jefes y empleados…Nadie quiere mostrarse vulnerable ni frágil, pretenden que nada les afecta, que están bien, cuando la mayoría siente una gran insatisfacción. Pero se maquillan, se ponen un traje bonito o se suben a un carro bonito y salen al mundo a decir que todo está perfecto. Toman antidepresivos y ansiolíticos, pero qué pocas píldoras toman para el alma.
¿Tendrá algo que ver con no querer enfrentarse el dolor?
No quieren enfrentarse al dolor porque tampoco tienen herramientas. No saben cómo transformar el dolor en sabiduría. Porque la sabiduría no es más que dolor curado. En mi libro planteo que hay que atravesar el dolor, no quedarse ahí para no convertirse en víctima. Cuando trasciendes el dolor llegas a la sabiduría.
Es lo que también se conoce como la noche oscura del alma, de la que habló San Juan de la Cruz. Pero hay gente que ni siquiera sabe que está pasando por una noche oscura...
Porque se acostumbran, se anestesian. Hasta que te pasa factura en forma de alguna enfermedad, por ejemplo. Es el alma gritando ‘vas por el camino equivocado’. Y por algún lado se te rompe la vida.
Cuando a uno se le rompe la vida, ¿cuál es el primer paso para sanar?
Mirar en tu interior. Yo hablo del escáner del alma. Escanear el alma para ver que está causando ese dolor. Entonces hay que ocuparse de esa herida, desinfectarla, curarla. Cuando esa herida sana, se convierte en cicatriz y ya no arde, ya no sangra. Esa cicatriz dignifica la lucha y el dolor que tuviste.