Continua la intervención en la invasión Tres calaveras, en la parte alta de Usaquén, con un componente integran de unidades especiales de Policía, Unidades de vigilancia y funcionarios de la Alcaldía de Usaquén, con el objetivo de identificar las bandas y garantizar la seguridad de la zona.
"La presencia policial es permanente en esta localidad y sobre todo en este sector. Se hacen los controles respectivos como requisas y registro a vehículos con el fin de mantener las condiciones de convivencia ciudadana", señaló el coronel Camilo Torres, oficial de inspección de la Mebog.
13 cambuches han sido derribados y se realizó un allanamiento en una vivienda que estaba en proceso de demolición. "En una vivienda que se encontraba en proceso de demolición en zona boscosa de esta residencia se encontraron tres armas de fuego; una tipo revolver, otra tipo pistola y una tipo mini uzi", señaló el coronel Torres.
En la inspección se encontró armamento de gran calibre: un arma traumática modificada de nueve milímetros, un arma de fuego fuego tipo revolver marca Smith Wesson calibre 38, y una sub ametralladora M11 calibre 9 milímetros,
En el lugar hay alta presencia de uniformados y equipos investigadores que buscan identificar a los integrantes de estas bandas criminales que han librado una fuerte disputa por el control del territorio y las ollas de microtráfico de la zona de Usaquén.
El gran incendio
Un grave hecho de inseguridad se presentó en la madrugada del martes 19 de julio en la invasión de tres Calavera, en el barrio Villa Nidia de la localidad de Usaquén, cuando un enfrentamiento entre dos bandas delincuenciales que utilizaron armas de largo alcance y granadas de fragmentación, desató un voraz incendió que consumió cerca de 12 viviendas del sector.
“Se encuentran venezolanos y gente de todas partes que viven allá arriba. Yo estaba durmiendo cuando me llamaron a decirme que se estaba quemando el barrio. Me dijeron que todo empezó cuando se quemó una casa y, debido a los cilindros de gas, el incendio se extendió por doce casas más”, señaló una habitante del sector.
Según establecieron las autoridades, desde hace varías semanas se ha venido presentando una violenta guerra entre bandas de ciudadanos venezolanos y colombianos quienes se están disputando el control del microtráfico y el dominio de las ollas de vicio.
Según denunció una de las residentes del sector, “en estos días se han presentado algunos enfrentamientos. Las autoridades llegan cuando se presentan los disturbios pero es que es muy difícil subir allá porque es una loma, es un cerro, y para que suba un carro para allá no hay manera”.
Tal es la situación que, en la madrugada de este martes, el enfrentamiento fue tan fuerte que las viviendas de la invasión terminaron destruidas y reducidas a cenizas.
REDACCIÓN BOGOTÁ