El representante del Gobierno en las conversaciones de paz, José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, y ‘Pablo Beltrán’, negociador de paz del Ejército de Liberación Nacional (Eln), aceptaron una invitación de este cronista para hacer un frente a frente entre los dos para EL TIEMPO.
‘Pablo Beltrán’: Yo estudié ingeniería de petróleo en la Industrial de Santander. Me botaron y después me llamaron, pero no quise volver.
¿Por qué?
‘Pablo Beltrán’: Me expulsaron sin causa. Luego rectificaron. Pero no volví.
¿Y por qué no quiso volver?
‘Pablo Beltrán’: Esto no lo he dicho nunca antes. En la Universidad yo ya estaba en el Eln; discutimos sobre volver y se decidió no hacerlo.
¿Para hacer qué?
‘Pablo Beltrán’: Yo ya tenía cargos en la guerrilla urbana.
¿Cómo es que después de 50 años suyos militando en la guerrilla y con tantos diálogos de paz y acercamientos con el establecimiento, a través de interlocutores de centroizquierda, esos encuentros fracasan y solo ahora parece que se acercan a un acuerdo, a dialogar con un hombre de derecha como José Félix Lafaurie?
‘Pablo Beltrán’: Hubo muchas novedades. Una es la primera vez que el Eln se sienta con un gobierno progresista. Dos, el Gobierno lo nombró como su representante.
¿Por qué, ‘Beltrán’, ha sido más exitoso el proceso de diálogo con un hombre de derecha como Lafaurie?
‘Pablo Beltrán’: Nosotros hemos hablado con José Félix sobre la necesidad de tener mejores tratados comerciales que animen más la producción colombiana. Eso es hacerle un ajuste al modelo económico. ¿Usted qué opina de eso, Lafaurie?
José Félix Lafaurie: Creo que se debe tener una mirada nueva en una coyuntura como la que vivimos. Los TLC se negociaron pensando en ampliar mercados. En el sector agropecuario lo ancho para ellos, USA, Unión Europea, etc., y lo estrecho para nosotros. Y es posible que en eso nos hubiéramos equivocado. Por eso, cuando ‘Pablo’ me habló del tema, acepté que un principio básico de la negociación parte de reconocer las responsabilidades. Yo creo que nosotros, como establecimiento, tenemos muchas cosas que eventualmente merecen revisarse, como ellos tendrán que revisar muchas otras cosas en que no lo han hecho de manera afortunada.
‘Pablo Beltrán’: Quiero recordar esto: cuando se reunieron Alberto Lleras y Laureano Gómez, en Sitges y Benidorm (en España), para acabar la guerra civil y comenzar el Frente Nacional, lo primero que dijeron fue esto: “Ambos somos responsables”.
José Félix Lafaurie: Nosotros cargamos con parte de la responsabilidad, pero ellos tienen otras responsabilidades. Creo que si uno es consciente de eso, es el punto de partida para encontrarle salida a las cosas. Asumir cada uno sus responsabilidades.
¿Cuál es la responsabilidad que usted asume, ‘Beltrán’?
‘Pablo Beltrán’: Yo no personalizo en José Félix. La responsabilidad es de la élite, del establecimiento. Lo que prima es que no quieren asumir responsabilidades.
Pero, entonces, usted ite que una gran ventaja que han tenido con Lafaurie como negociador es que él acepta la responsabilidad que su sector ha tenido. ¿Y cuál es la responsabilidad que ustedes han tenido?
‘Pablo Beltrán’: Yo soy de la dirección del Eln desde el año 1983.
José Félix Lafaurie: ¿40 años?
‘Pablo Beltrán’: Sí. Yo soy responsable de lo que se hace bien y de lo que se hace mal.
¿Qué han hecho bien?
‘Pablo Beltrán’: Luchar para que este país cambie y no pedimos nada a cambio.
¿Encontraron en el doctor Lafaurie un buen interlocutor?
‘Pablo Beltrán’: Sí, él también quiere que haya cambios.
¿Es un buen negociador?
‘Pablo Beltrán’: Bueno, hasta ahora. Hemos firmado algunos acuerdos muy iniciales y él ha aportado. O sea, no ha sido una figura decorativa.
¿Pesan sus posiciones?
‘Pablo Beltrán’: Pesan más de lo que usted cree.
José Félix Lafaurie: Como Santo Tomás.
‘Pablo Beltrán’: Ha tomado con juicio la tarea de ser negociador del Gobierno.
Ahora, Lafaurie, ¿qué tan buen negociador ha sido ‘Beltrán’?
José Félix Lafaurie: ‘Beltrán’ hace muy bien su papel de negociador. Es una persona serena, tiene una mirada tanto de contexto en los temas que se analizan como foco para poder aportar en la discusión, incluso en momentos críticos. Lo cual no significa que lo que él crea o piense sea lo que yo crea o piense.
¿Se han presentado discusiones en las que a veces ustedes se enredan?
José Félix Lafaurie: Siempre. Hay que distinguir con lucidez qué cosa es importante y qué no.
¿Qué hace falta para consolidar un acuerdo de paz?
‘Pablo Beltrán’: Que dejen trabajar a Petro. Hay una oposición cerril que no quiere que él haga reformas. No es culpa de él. Pero resulta que es una oposición poderosa.
José Félix Lafaurie: Yo creo que el señor ‘Beltrán’ tiene una equivocación, porque él es un jefe de una facción armada y él no ha vivido en democracia. La democracia es el disenso, es precisamente debatir abiertamente las posturas que tiene una sociedad variopinta. Aquí no estamos en unas sociedades de orientación comunista con partido único. Aquí hay partidos políticos y me parece que él tiene que hacer una reflexión profunda, porque si todos estamos en lo mismo, tendrá que llegar a un acuerdo y ese acuerdo va a implicar desmovilizarse. Hay que construir consensos y eso implica los grandes acuerdos. Y eso es un tema de fondo, ‘Pablo’. Y es una reflexión: los acuerdos no se imponen, se discuten y se ajustan.
‘Pablo Beltrán’: Coincidimos y discrepamos. Uno de los puntos de acuerdo más importantes que hemos hecho es que hay que oír a la gente. Estamos buscando eso, que haya diversidad y no va a ser de mayorías y minorías, sino de consensos. En eso estamos de acuerdo. ¿En qué estamos en desacuerdo? Voy a hablar mal del Congreso, pero toca. El Congreso es una institución muy desvalorizada en Colombia.
José Félix Lafaurie: De control político.
‘Pablo Beltrán’: Ah, sí. Pero lo que pasa es que el control político usted se lo aplica es al que no debe y le pone la lupa a otro. Por eso están medio temblorosos varios entes de control. Eso desprestigia las instituciones. Tenemos una discrepancia.
José Félix Lafaurie: ¿Usted sabe cómo se llama eso? Ponerle a la política tono moral.
‘Pablo Beltrán’: Claro. Las instituciones son para hacer grande una nación, para servirle a la mayoría de la gente y eso no está ocurriendo así.
José Félix Lafaurie: Le pregunto: ¿la autoridad dónde queda? ¿Y quién ejerce la autoridad?
‘Pablo Beltrán’: Sí, hablemos de eso. Mire: aquí, que hay muchos robos. ¿Quién dijo que el problema de los robos solamente se arregla con policía? Hay unos efectos casi criminales de un sistema que produce delincuencia. Usted no solamente puede arreglar esto con policía, la gente roba para comer porque muere de hambre.
¿Ustedes, el Eln, están dispuestos a desmovilizarse?
‘Pablo Beltrán’: La agenda que firmamos en México dice que vamos a crear unas condiciones para que haya solución política del conflicto. Mire lo que está pasando con las Farc. ¿Cuántos van muertos? Centenares. No dejan de matarlos todos los días.
José Félix Lafaurie: Es el problema de las armas.
‘Pablo Beltrán’: Las Fuerzas Armadas dicen que tenemos 500.000 fusiles. Las armas en poder de la población están entre 3 y 4 millones. La mayoría sin ningún tipo de autorización legal. El año pasado murieron con armas 21.000 colombianos. Le hemos propuesto al Gobierno esta reflexión. Hay armamentismo. El problema es que muchas veces el Estado no las usa bien. ¿Por qué no deja de entregarles armas a civiles? ¿O quieren que resolvamos solamente el problema de las armas del Eln?
José Félix Lafaurie: Donde hay coca, hay armas; donde hay armas, hay violencia; donde hay violencia, hay muertes.
‘Pablo Beltrán’: Pero más que muertes hay descomposición social.
José Félix Lafaurie: Entonces, le agrego: hay muertes y descomposición social. Pero en el narcotráfico hay control territorial. Mafias.
‘Pablo Beltrán’: Sí. Carteles.
Le insisto: ¿Están dispuestos a desmovilizarse si tienen protección?
‘Pablo Beltrán’: Es más que eso. El acuerdo que firmamos con el Gobierno dice que vamos a buscar transformaciones para la paz. Y dentro de esas transformaciones una es muy importante: que detengan la persecución política y el exterminio.
José Félix Lafaurie: Evidentemente aquí tenemos un lío muy complicado y los que se están afectando son los sectores más pobres, más vulnerables y, al mismo tiempo, más marginados del desarrollo. Entre más lejos de desarrollo, más golpeada está la gente. Ahí es donde hay que buscarle una salida inteligente a este tema.
Pero, entonces, ¿la paz con el Eln no está lejos?
‘Pablo Beltrán’: Es posible. Si el Gobierno mantiene una fuerza para perseguir los objetivos que hemos acordado, vamos en la dirección correcta. Pero si el Gobierno pierde fuerza, pues el ritmo de avance será más lento.
¿Usted confía en llegar a un acuerdo final de paz?
‘Pablo Beltrán’: Yo pienso que hay buena voluntad política y buena fe.
Es decir, ¿usted es optimista?
‘Pablo Beltrán’: Le voy a responder de dos maneras. Yo soy pesimista del intelecto y optimista de la voluntad. ¿Qué quiere decir? Si en este camino hay muchos obstáculos, hay bajonazos, hay crisis, eso es ser realista, o sea pesimista del intelecto. Pero hay que tener una voluntad positiva de seguir persistiendo en ese camino.
¿Y por qué su intelecto es pesimista?
‘Pablo Beltrán’: Yo conozco muy bien el país y sus fuerzas políticas.
José Félix Lafaurie: Estamos en el lanzamiento de un movimiento donde 81 organizaciones de 30 sectores se van a encargar de promover 25 foros, 15 o 16 en Bogotá, con diferentes sectores de la sociedad.
‘Pablo Beltrán’: Incluido el Eln.
José Félix Lafaurie: Claro, ahí están. En esos sectores están incluidos Eln, agricultores, comerciantes, industriales, Consejo Gremial, sindicatos, jóvenes, negros, indígenas.
¿Cuándo termina?
José Félix Lafaurie: Termina en febrero. Se recogerán recomendaciones para tener claro el diseño con el que la sociedad, a partir de febrero del 24, hasta mayo del 25, identificará cuáles son las transformaciones que habría que hacer para remover las causas que hoy generan una violencia, según el Eln, estructural.
‘Pablo Beltrán’: En Colombia se han intentado muchas cosas para que la paz avance. Intentar una más es bienvenida. Hasta que la logremos.
¿Tiene fe?
‘Pablo Beltrán’: Sí, claro. Si uno no tiene fe está perdido. Y usted, dr. Lafaurie, ¿tiene fe?
José Félix Lafaurie: Claro, uno tiene que ponerle a esto entusiasmo. Usted ha dicho una cosa que me parece bien. Uno tiene que poner actitud y fe. Poner palos a la rueda no tiene ningún sentido. Hay que buscar que las cosas salgan adelante. Pero ahí viene el pero. Este es un país que necesita transformaciones. Y aquí hay dos tipos de transformaciones: una es el territorio. A mí me parece que la Colombia rural no puede seguir careciendo de los bienes públicos básicos esenciales, para que 14 millones de colombianos que viven en el sector rural puedan vivir de manera decente, con vías, con educación, con salud, con seguridad, bienes públicos, que el Estado tiene la obligación de proveer y que no lo ha hecho. Usted se va al Catatumbo, al sur de Bolívar, para poner área donde está el Eln. Allá se carece de todo. Si el país comprendiera esa dimensión, tendría que parar de llevar unos recursos para que se los roben.
‘Pablo Beltrán’: Eso es lo que está escrito en el acuerdo que llamamos “agenda”. Y eso es lo que se va a buscar. Por eso nuestra gente va a ir al Consejo Gremial.
José Félix Lafaurie: Esa reforma implica un gran acuerdo con recursos fiscales y voluntad política. Por eso lo que yo les he planteado siempre a los amigos del Eln es que tengamos un piloto demostrativo de que “sí se puede”, como decía Betancur. Hagámoslo donde quieran, en Arauca, en el Catatumbo, en el sur de Bolívar, en cualquier lugar, un piloto de paz. Escojamos un lugar para mandar un mensaje positivo a la sociedad colombiana.
‘Pablo’, Lafaurie acaba de mencionar recursos fiscales, ¿uno de los debates a raíz de la intención del Eln de firmar la paz es de qué van a vivir?
‘Pablo Beltrán’: Las operaciones de finanzas. Seguimos discutiendo para que el Eln deje de hacer operaciones de finanzas mientras que estamos en el cese.
¿Van a seguir secuestrando?
‘Pablo Beltrán’: Más que secuestros, el Eln tiene un sistema de impuestos. No se le cobra ni al mediano ni al pequeño, se les cobra a los grandes.
¿Ustedes, los ganaderos, pagan, Lafaurie?
José Félix Lafaurie: No, mire, yo estoy en total desacuerdo con lo que dice el señor ‘Beltrán’, porque ellos firmaron otra cosa. Incluso, me leí curiosamente los estatutos del Eln. Tengo casi un incunable de ustedes del año 80. En la página 63 ustedes dicen que los estatutos cumplirán rigurosamente el Derecho Internacional Humanitario. El DIH prohíbe cualquier retención. El secuestro lo tiene prohibido. Y ustedes lo han acordado también en el Acuerdo 9 sobre participación. Ustedes no pueden secuestrar ni al rico, ni al pobre, ni al chiquito, ni al mediano, ni en una zona, ni en otra. Ustedes no pueden secuestrar.
‘Pablo Beltrán’: El Eln cobra unos impuestos igual que los cobra el Estado.
Pero usted me dijo antes que no más secuestros...
‘Pablo Beltrán’: Mejor dicho, la intención es no hacerlo.
José Félix Lafaurie: ¿Cómo se van a financiar?
‘Pablo Beltrán’: Hay propuestas de acudir a la comunidad internacional para que mientras que estemos en cese haya alguna ayuda exterior, para evitar operaciones de finanzas. Eso está en discusión. Entre menos se generen críticas, mucho mejor.
Si eso no se logra, ¿seguirá el secuestro?
‘Pablo Beltrán’: Yo creo que vamos a lograr el apoyo internacional. En eso soy optimista.
El cese termina en febrero, ¿ahí qué pasa?
‘Pablo Beltrán’: ¿Qué aspiramos de aquí a allá? Tener un acuerdo para cuando haya una prórroga del cese hayamos resuelto ese problema de financiación. Y en la siguiente prórroga del cese, que se incluya el cese de las operaciones financieras del Eln.
¿Conclusion, Lafaurie?
José Félix Lafaurie: A mí me parece que evidentemente el día que haya un cese del fuego definitivo y entreguen las armas, necesariamente el Estado y la comunidad internacional deben acudir a prestarles apoyo a los excombatientes.
¿Hay acuerdo sobre entrega de armas?
‘Pablo Beltrán’: Ahora estamos hablando del inicio del proceso, no del final.
No, pero ¿cuándo entregan armas?
‘Pablo Beltrán’: Pues vamos a crear las condiciones para que no sean necesarias las armas. A eso se dedica este proceso. Que el Estado las use bien, sin esas armas que están por ahí. Ilegales…, dónde me deja a los 6.400 ‘falsos positivos’. ¡Y siguen!
¿Qué hacer, Lafaurie, para que eso termine, los ‘falsos positivos’?
José Félix Lafaurie: Dos cosas. Lo primero, manzanas podridas hay en todas partes. Además, los autores están juzgados y muchos de ellos condenados. La ley tiene que actuar con absoluta drasticidad, porque si la Constitución le entrega el monopolio de las armas, la Fuerza Pública es para que defienda al ciudadano y no para que lo asesine.
¿Usted tiene fe en que logrará la paz, ‘Beltrán’?
‘Pablo Beltrán’: Sí. Por las buenas. En eso estamos.
¿Y usted, Lafaurie?
José Félix Lafaurie: El país la reclama y habrá que hacer los esfuerzos necesarios para lograrla.
YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO