El pasado 13 de enero se dio a conocer la lamentable muerte de ‘Homero’, el perro de raza American bully, en un vuelo local que cubría la ruta de Puerto Asís a Cali. Ese trágico hecho despertó preguntas entre propietarios, transportadores y el público en general sobre cómo deben viajar las mascotas.
En un comunicado, la aerolínea menciona la necesidad de presentar un certificado médico de apoyo emocional. Pero ¿qué es un animal de apoyo emocional (AAE)? ¿En qué casos se usa? ¿Cualquier animal puede ser considerado de apoyo emocional?
Es bien conocido que las mascotas o animales de compañía benefician la parte psicológica y conductual de las personas, ayudan a combatir la depresión, reducir el estrés, miedo o angustia, reforzar la autoestima, evitar el sentimiento de soledad. También aumentan y mejoran el sentido de responsabilidad, ayudan a crear rutinas y organizar los horarios de las personas, motivan a hacer actividad física.
¿Pero qué es un AAE?
Es una figura que crearon las autoridades de vivienda y aeronáuticas de Estados Unidos para permitir que los animales de compañía puedan viajar en cabina, y no sean considerados como mascotas en el momento de adquirir una vivienda o puedan acompañar a los amos o tutores en espacios como oficinas, colegios o universidades.
Son animales que ayudan a las personas a superar miedos, ansiedad o traumas, brindando apoyo terapéutico a su tutor a través del afecto y la compañía. Hacen parte del tratamiento psicológico, psiquiátrico o médico de los pacientes.
Difieren de los animales de servicio que ayudan a personas con discapacidades como perros lazarillos, perros detectores de sonidos o de condiciones como la epilepsia, entre otros.
A diferencia de los de servicio que ayudan a las personas con discapacidades diferentes y deben permanecer cerca del ser humano al que asisten, los que brindan soporte emocional no necesariamente deben ser itidos en todos los espacios.
¿Quiénes los necesitan?
Están recomendados para personas que tienen episodios recurrentes de miedo, pánico, ansiedad o fobias. También, en casos de estrés postraumático, pues tienen la facultad de hacer sentir mejor a los tutores en caso de presentar una situación adversa.
¿Cómo demostrarlo?
Para certificar un animal de apoyo emocional se debe contar con una prescripción de un médico, psicólogo o psiquiatra. Ellos evalúan la situación de la persona y los beneficios que el animal traerá para la condición psicológica o emocional a través de técnicas avaladas por la comunidad médico-científica.
Adicional a este certificado se necesita que el animal esté entrenado en obediencia básica para que no represente peligro para las demás personas, sepa comportarse en público y atienda con facilidad y rapidez a las órdenes que se le indiquen.
Al momento de viajar…
Para viajar se debe consultar con anticipación en las aerolíneas, las empresas de transporte o los demás espacios, pues algunas exigen notificar de esta condición mínimo 48 horas antes del viaje. Además, diligenciar formularios y reportar porte de elementos como correa, traílla, bozal y de aseo.
Se recomienda llevar el certificado expedido por el profesional de la salud, y el de entrenamiento básico y un certificado médico veterinario que garantice las condiciones de salud del animal para realizar el viaje. Estos pueden ser requeridos en el momento de adquirir los tiquetes y en el momento de viajar.
No existe una reglamentación que especifique que los animales de apoyo emocional deban ser identificados de alguna forma, más allá de la documentación mencionada; sin embargo, lo ideal es que el propietario los identifique con collar, arnés o placa especial.
En Estados Unidos los animales de apoyo emocional pueden viajar libremente en cualquier tipo de transporte con su propietario, sin limitaciones de raza, tamaño o peso, y adicionalmente viajan gratis en algunas aerolíneas. No requieren guacales u otro tipo de jaulas de transporte.
Las razas más recomendadas
Cualquier animal, sin importar su especie, puede ser considerado de apoyo emocional. Existen razas ideales para esta labor por ser inteligentes, empáticos, equilibrados e intuitivos como golden retriever, labrador retriever, pastor alemán, corgi y poodle. Pueden ser de cualquier tamaño y deben estar cerca de su tutor.
La documentación legal debe:
- Estar escrita en un papel membretado por parte del profesional.
- Tener la firma original del profesional de la salud con el número de matrícula. Cualquier información falsa o suplantación es considerada un delito.
- Contener los datos de o del profesional: teléfono, dirección, etc.
- Certificación de la condición física o psicológica por la cual se necesita el soporte emocional, así como la confirmación de que dicha condición impide la realización de actividades vitales significativas como estar en espacios públicos, socializar, viajar en avión, entre otros.
- Una declaración de que el animal de apoyo emocional hace parte del tratamiento.
- Se recomienda siempre especificar el nombre, la especie, la raza y la edad del animal.
GABRIEL GARCÍA - @NoSoyEseGabo
Médico veterinario