El programa Nutriendo Sonrisas avanza en su labor

Más del 30 por ciento de los niños y niñas con la condición de labio fisurado y/o paladar hendido en Colombia, sufre de desnutrición crónica, reveló la Fundación Operación Sonrisa, a tres días del Día Mundial de la Nutrición que se conmemora el 28 de mayo.

Según la Fundación, con más de 27 años de trayectoria en el país, la desnutrición crónica infantil es la consecuencia más evidente de factores como pobreza, escasa educación, desigualdad social, falta de de alimentos, falta de a agua y saneamiento insalubre, alimentación insuficiente y atención inadecuada de enfermedades; un panorama que en Colombia afecta a más del 54,2 por ciento de los hogares.

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Además, sostiene que no solo estos factores conllevan a la desnutrición infantil. Existen otros de tipo fisiológico como la condición de labio fisurado y/o paladar hendido que, sumados a las condiciones de los hogares, impiden a los niños y niñas alimentarse adecuadamente desde sus primeros años de vida al no poder llevar a cabo la lactancia materna con normalidad o ingerir alimentos sólidos por miedo a bronco aspirar.

Para Marcela Forero, directora ejecutiva de la Fundación Operación Sonrisa en Colombia, “esas familias hacen parte, en gran proporción, de poblaciones en condiciones de vulnerabilidad, sin trabajos estables, ni al sistema de salud o migrantes sin garantías de derecho. Es necesario brindarles tratamientos integrales para que puedan llevar una vida con normalidad, más allá de la corrección quirúrgica de la malformación”.

Para eso, la Fundación creó el programa Nutriendo Sonrisas, que inició en mayo del 2021 en medio de la pandemia, y que da tratamiento integral y nutricional a estos menores. “Para hacer las intervenciones quirúrgicas para corregir esta condición es necesario que tengan un estado de salud óptimo, y la nutrición es el primer problema a resolver”, dice Forero.

Así mismo, han entregado 1.100 paquetes alimentarios en La Guajira, Atlántico, Córdoba, Boyacá, Antioquia y Cauca; y brindado atención y comienzo de terapia de suplemento de alimentación a más de 260 niños y niñas.

En cifras generales, en Colombia, el 10,8 % de los niños y niñas menores de 5 años presentan retraso en talla, el 3,1 % desnutrición global o bajo peso para la edad y el 1,6 % desnutrición aguda o bajo peso para la talla.

Las consecuencias en niños y niñas que padecen desnutrición, además de la muerte, puede ser la reducción en la capacidad física y la productividad económica, disminución en la capacidad intelectual y de aprendizaje, deterioro del crecimiento y desarrollo físico, deficiencias metabólicas o enfermedades, difícil recuperación de lesiones o cirugías.

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