Luego de que el Icfes diera a conocer los resultados individuales de las pruebas Saber 11 de calendario A (de la que participaron 498.583 estudiantes de grado 11 de todo el país), la entidad también reveló algunos datos a nivel nacional, a dos meses de que se revelen oficialmente los resultados agregados de las pruebas, que brindarán un panorama mucho más completo del desempeño de los estudiantes este año. Entre ellos, las regiones con mejores puntajes.
Entre los datos revelados se encuentra que el promedio nacional de este año fue de 259 puntos, sobre 500 posibles. Y, aunque a simple vista esta cifra pueda parecer muy baja, la verdad es que se trata de una mejoría con respecto al puntaje de 2023, que fue de 257, lo cual, de acuerdo con los datos y con expertos consultados por EL TIEMPO, confirma una tendencia al alza en los últimos tres años, luego de una constante caída que preocupaba a analista, colegios y Gobierno.
Así lo explica el analista educativo Ricardo Rodríguez: “Es cierto que el promedio global sigue dejando mucho que desear, pero ese es un problema histórico. Pero estamos viendo que los resultados no solo superan a los obtenidos en la pandemia (cuando se esperaba que fueran bajos), sino que además en 2024 se obtuvo el tercer promedio más alto desde 2014, que es cuando se inició con el actual método de evaluación".
Y es que desde que el puntaje global alcanzó su máximo histórico en el año 2016 (264 sobre 500), los resultados no hicieron más que bajar desde entonces, incluso sin los efectos del confinamiento y el cierre de colegios por la pandemia del covid-19, hasta llegar a su punto más bajo en el 2021 (250).
De acuerdo con Luisa Vergara, máster en políticas educativas, aunque parezca que incrementar dos puntos el resultado global de 2023 a 2024 pueda parecer poco, la verdad es que se puede decir que los puntajes de este año fueron positivos, y esto se debe a que se estaría consolidando una tendencia al alza en las pruebas de Estado.
“Las pruebas Saber 11 pretenden ser un diagnóstico de la calidad de la educación. Y evidentemente 259 puntos está muy lejos de los 500 puntos posibles que mide la prueba, lo que nos dice que evidentemente tenemos serios problemas en la educación preescolar, básica y media”, señaló Vergara.
Y añadió: “Pero al ver las variaciones históricas (ver el gráfico) ese ha sido el comportamiento histórico del país. Por eso preocupaba lo que pasó entre 2016 y 2021 porque la caída era evidente. Se perdieron 14 puntos en cinco años y darle la vuelta a esa estadística suele tomar mucho tiempo. Recuperar eso es difícil, porque implica un enorme esfuerzo de todo el sistema educativo para fortalecer competencias y es poco lo que se puede hacer en los últimos grados, donde los rezagos de aprendizaje están ya acumulados. Por eso mismo es muy positivo no solo que se frenara la caída, sino que llevemos tres años consecutivos mejorando los puntajes”.
Para Elizabeth Blandón, directora del Icfes, esta leve mejoría radica particularmente en que se mejoró el desempeño en dos competencias: “En 2024 el promedio global se incrementó en 2 puntos frente a 2023. Este resultado se presenta por el aumento en las pruebas de Matemáticas (1 punto) y Ciencias Naturales (1 punto), mientras que el resto de las pruebas no presentaron variación”.
Es muy positivo no solo que se frenara la caída, sino que llevemos tres años consecutivos mejorando los puntajes
Pero los expertos advierten que la tendencia al alza no implica que solo hay noticias buenas con las recientes pruebas Saber 11. De hecho, se siguen presentando importantes brechas que dan testimonio de las profundas desigualdades que persisten en el país en materia educativa.
Una de las diferencias más notorias es la que se presenta entre colegios privados, que este año alcanzaron un promedio global de 287 puntos, frente a los públicos, cuyo puntaje fue de 252, es decir, una diferencia significativa de 35. Con todo esto, vale resaltar que la brecha se redujo un poco comparado con 2023, cuando fue de 37 puntos. Donde sí se incrementó la diferencia fue entre los colegios ubicados en zonas urbanas (265 puntos) frente a aquellos en zonas rurales (235).
“Acá vemos dos escenarios complejos que refleja la desigualdad de oportunidades, pero también de calidad. A colegios públicos, y más aún a colegios rurales, asisten principalmente personas más desfavorecidas. Y si bien mejoramos como país, seguimos en deuda con esas poblaciones que requieren de políticas más efectivas por parte del Estado”, señaló Vergara.
Y lo mismo ocurre entre hombres y mujeres, que este año presentó un promedio de 264 para ellos y de 255 para ellas. Aunque el puntaje para ambas poblaciones creció, la brecha se hizo levemente más grande.
Las regiones destacadas
El Icfes no ha revelado aún la clasificación nacional por entidades territoriales certificadas (todos los departamentos más los municipios que cuentan con su propia secretaría de educación). Sin embargo, sí presentó las tres que ocuparon los primeros lugares. Se trata concretamente de Floridablanca (294), Duitama (294) y Tunja (293).
Lo que es llamativo es que, al menos en el imaginario popular, los primeros lugares deberían ser ocupados por grandes ciudades, donde los colegios, tanto públicos como privados, cuentan con mayor presupuesto y mejores condiciones, como es el caso de Bogotá o Medellín.
Sin embargo, la verdad es que en lo que se refiere a los datos históricos del Icfes, esto no es una sorpresa. De hecho, estos tres municipios, y algunos más como Envigado, suelen ser los de mejor desempeño cada año, mientras que las grandes ciudades suelen verse más rezagadas.
Por ejemplo, Floridablanca lleva años teniendo a algunos de sus colegios dentro del selecto grupo de los mejores del país, como es el caso del colegio Nuevo Cambridge o hace un par de años La Quinta del Puente, que cerró en 2022 luego de ser considerada por mucho tiempo como la mejor institución del país.
MATEO CHACÓN ORDUZ
Subeditor Vida - Educación