Explosión de color y siluetas con volumen en las pasarelas de Madrid

La agenda de las fashion weeks de febrero continúa esta semana en la capital española con las propuestas de 42 diseñadores españoles y sus colecciones de otoño-invierno 2023-2024 que se están presentando en la edición número 77 de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid.

Después de los desfiles OFF que se celebraron en diferentes locaciones de la ciudad, ayer se dio comienzo al evento en el recinto ferial IFEMA, con las pasarelas de Ágatha Ruiz de la Prada, Andrés Sardá, Jorge Vásquez, Pedro del Hierro, Pablo Erroz, Encinar y Paloma Suárez.

Con una propuesta vibrante y llena de color, la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada fue la encargada de dar inicio a la programación de la fashion week. En su colección, cargada de volúmenes y referencias surrealistas, cada uno de sus looks tomó como inspiración los elementos de sus icónicas fragancias: Los besos, gotas de agua, flores, estrellas y corazones. En cuanto a los materiales, en la propuesta abundaron las capas de transparencias, lentejuelas, licras, terciopelos y peluches abullonados en las formas mencionadas anteriormente que dan un toque juguetón y divertido.

La agenda continuó con Andrés Sardá y su nueva colección que "habla de alegría" cómo afirmó Núria Sardá, directora creativa, en el backstage. Esta además se sitúa en un pueblo en la montaña donde las mujeres pasan unos días fríos en sus chalets.

"Despertamos por la mañana en la habitación, donde ellas llevaran todo tipo de prendas de inspiración lencera a base de bordados ses en color plata combinados con raso, bordados con motivo animal print, tules dorados y cristal de Swarovski, para luego cambiarse para ir a esquiar. Los looks de esquí son totalmente “a la SARDA”, realizados en encaje y contrastados con piezas más propias de la práctica de este deporte, pero bajo nuestra visión. Los colores que predominan en este grupo son el rojo y el blanco", menciona la marca en un comunicado. En la pasarela también se vieron plumones, trajes con chaqueta, prendas en piel sintética ecológica y vestidos metalizados que contrastaba con los conjuntos de ropa interior.

Luego, atraído por el orientalismo seductor de Marrakech, de los años 60, Jorge Vásquez tuvo como hilo conductor la seducción y el lujo de Oriente para su colección de otoño-invierno 2023. El diseñador vistió a una mujer envuelta en misticismo y con ciertos aires hippies utilizando una paleta de colores terrosos y arenosos mezclados con tonos ácidos como naranja, lima y fucsia. También se destacaron los tejidos fluidos, bordados y estampados con forma de mosaicos.

La programación también incluyó la pasarela de la firma de moda española para mujer y hombre, Pedro del Hierro, en donde la explosión de color y diferentes tipos de siluetas también estuvieron presentes. Bajo el concepto Ópera Prima, la nueva colección rinde homenaje a la ópera. Esta se compone de looks de gala en donde destacaron los tejidos brillantes, lentejuelas, terciopelo y transparencias. En lo relacionado a los atuendos masculinos, la propuesta estuvo orientada a las siluetas relajadas y ricas en volumen y color.

Después el turno fue para Pablo Erroz quien presentó una colección diversa, amplia y llena de contrastes, en donde predominó el color y las mezclas de materiales, mediante una puesta en escena que mostraba el universo mobiliario de su marca. En cuanto a las líneas de la colección, también resaltaron las múltiples combinaciones de rayas, cuadros y prints geométricos así como las siluetas deportivas unidas a la sastrería.

Otro de los participantes del primer día de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid fue Encinar, una firma que nació con la intención de vivir a medio camino entre la costura y el ready to wear. Su puesta en escena fue una de las más llamativas de la jornada: en el centro de la pasarela había una mesa de varios metros de longitud adornada con flores, copas y comida que simulaban los restos de una cena de gala. Sobre la colección de invierno, esta era una prolongación que la firma comenzó como una colección creciente. Además de resaltar el color rosa y negro, la propuesta mostró siluetas amplias y con movimiento que se complementaban con moños.

El último desfile de la noche estuvo a cargo de la diseñadora Paloma Suárez quien eligió el número 23 para dar nombre a su nueva colección. Como explicó en las notas de prensa, "cada persona suele tener su número de la suerte. Algo que, por algún motivo le produce buenas energías, recuerda un buen momento o ha estado presente en momentos importantes de su vida".

Además de colores intensos como el azul, fucsia y amarillo, la diseñadora optó por piezas de sastrería que combinan materiales y texturas como lentejuelas con el clásico estampado de pata de gallo.